Rosenhöhe

Ayer hizo un día estupendo. A pesar de tener muchas tareas pendientes, decidí que quería salir de casa, asi que sin darle demasiadas vueltas, cogí el autobús para ir a la Rosenhöhe. Se trata de un parque bastante grande al este de Darmstadt, pero a pesar de llevar aquí más de dos años, nunca había estado. El nombre significa "colina de las rosas": desde luego, al subir la cuestra del camino de entrada, pude comprobar que al menos una parte del nombre se corresponde con la realidad :D Una vez arriba, hay vistas sobre la ciudad y las prometidas rosas. El Sol inundaba el parque haciendo brillar los colores y el aire era renovador: me vino bien :)

El parque fue renovado gracias a una asociación: sino, no hubiera habido dinero

Sin embargo, lo que más me impresionó fue lo que vi una vez cruzado el parque. Tampoco había andado demasiado, pero al otro lado de la verja que delimita la Rosenhöhe, no había nada. No había casas ni carreteras, sino tan solo campo. Un camino de tierra, unos pocos árboles y nada más. Era un paisaje tranquilizador. No imaginaba que fuera tan fácil llegar al límite de la ciudad andando. Hasta cierto punto, la vista se parecía al fondo de pantalla por defecto de Windows XP :D Hoy han vuelto las nubes y acaba de empezar a llover: desde luego, en este país no se puede dejar pasar ni una oportunidad para ver el Sol!

La entrada principal está vigilada por leones subidos a columnas (Foto © amras_de)

No vi todo el parque en el paseo, pero por suerte está cerca (Foto © DerSüdhesse)

Un año en la Pützerstraße

Hoy hace un año me dieron las llaves de mi piso en Darmstadt. Tras doce meses, la verdad es que estoy muy contento con la casa :) Las primeras noches fueron un poco extrañas, ya que los únicos muebles eran mi cama hinchable y una estantería de la inquilina anterior. Entre tanto, han pasado un montón de cosas: no solo vivo ahora en una casa amueblada, sino que en los últimos doce meses he recibido visitas que me han hecho una ilusión enorme, he hecho viajes geniales y he podido compartir un montón de cosas con gente estupenda :) Son grandes recuerdos que guardo en forma de fotos, entradas de blog o mi calendario.

Sin duda, mi destino más frecuente durante este año ha sido Madrid

Al igual que otras veces, durante este tiempo también he ido guardando entradas, billetes de avión, mapas y todo tipo de objetos que me recuerdan lo que ha pasado este año. Aprovechando el aniversario, esta tarde he decidido recopilar todos esos "enlaces" y archivarlos. Sin embargo, antes de hacerlos desaparecer en un sobre en las profundidades de mi estantería, he buceado un rato entre los recuerdos y los he agrupado por temas. Pongo unas cuantas fotos de lo que he encontrado antes de cerrar el sobre: no se trata de dar una importancia enorme al pasado, sino guardar enlaces para poder reconstruir mejor un recuerdo cuando se busca.

Heidelberg, Darmstadt, Würzburg y Múnich en Septiembre del año pasado :)

Aparte de postales, también he recibido cartas de mis padres, tíos y amigos

Darmstadt. Adivinanza: ¿como se llama al restaurante al que solemos ir a comer? :P

Este año he tenido la suerte de poder pasar dos temporadas largas en Madrid

París - Kaiserslautern - Múnich :)

Viaje a Valencia: las tarjetas con dibujos son billetes sin contacto del Metro!

Viajes de la universidad: aunque no presentara nada, pude ir a una conferencia en Berlín

La Cena de la Tarta de Queso

Hace unas semanas puse un video que documentaba mi intento de hacer una tarta de queso para el departamento. El resultado del experimento fue bastante bueno, así que decidí intentar repetir la hazaña aquí en Madrid y de paso combinarlo con una gran cena en mi casa: me apetecía un montón hace una invitación y me hizo mucha ilusión que casi todo el mundo pudiera apuntarse :) Al final eramos doce invitados y yo, casi como en La última cena :P El menú consistió en nachos con guacamole por Camsua, empanadillas por Cierta Personita, cantidades ingentes de pasta por Parmacenda y tarta de queso por Adrovsky.

Preparar pasta para trece personas no es tan fácil como parece

A lo largo de la cena se extendió un rumor completamente injustificado que ponía en duda la autoría de la tarta de queso, implicando a mi madre en el asunto. Sin duda alguna, una gran falacia, o al menos totalmente exagerado, según mi punto de vista :P Otro detalle insignificante que adquirió protagonismo sin razón fue que en este caso había mezclado los ingredientes con ayuda mecánica, en vez de a mano como en Darmstadt. Sin embargo, defiendo que le di al botón de encender de la maquina con el mismo "amor y cariño" que mezclé los ingredientes a mano en el primer experimento :D

Aquella tarde aprendí a hacer empanadillas :)

La parte más divertida vino tras la cena, cuando probamos el juego que consiste en que cada uno escribe una frase en un papel y se lo pasa al siguiente que tiene que dibujar lo que ha escrito el primero. Después se dobla el papel y se pasa al vecino, que tiene que volver a escribir la frase solo viendo el dibujo. El sistema permite pipelining, por lo que todo el mundo está entretenido todo el rato, y además los resultados tras completar una ronda suelen ser tremendos :D La cantidad de ruido que añade cada paso es enorme, resultando en una SNR para partirse de risa: el resultado escaneado se puede ver aquí (enlace).

En contra del mito existente, esta sartén nunca fue amarilla :P