Robot PSY

No sabía muy bien que esperar de Corea. De la del Sur, se entiende. Antes de pisar la tierra del Kimchi, solo sabía que tienen un vecino que se apunta a un bombardeo y que Gangnam no solo viene de una canción sino también de un barrio. Del vecino no oí nada en los nueve días que estuve ahí, lo cual agradecí. Pero de la canción tampoco escuché ni un acorde, por lo que toda mi imagen de Corea del Sur amenazaba con desmoronarse. Pero en el aeropuerto, poco antes de regresar a Europa, se recuperó el equilibrio: nos encontramos con mini-robots de tecnología punta bailando los éxitos de PSY. Ahora ya podía regresar tranquilo a casa :D

Cuando nos dominen los robots, esto nos lo van a cobrar caro