El 1 de Febrero fue el examen de STLN ("Sistemas Lineales"): Es una asignatura de la que se oye hablar ya en primero. Muchas taquillas tienen la pegatina que regaló una vez el Eco (La revista de Teleco) en la cual se ve a un estudiante con risa nerviosa sosteniendo un examen en el que pone "5.0" y diciendo "Yo aprobé STLN a la octava".
Es una de las múltiples asignaturas en las que parece que los profesores se precian de alcanzar el (mítico) 90% de suspensos. Se podría llegar a la conclusión de que el motivo de este desastroso resultado es que los profesores no han sido capaces de enseñar bien a los alumnos, pero no es cierto. El problema no es la enseñanza, sino probablemente la evaluación.
Reconozco que mi examen no fue excelente. Sin embargo conseguí resolver tres de cuatro problemas, es decir, con un márgen de 2,5 puntos para aprobar. Algo sorprendido ante la nota provisional (4,0) fui a revisión. Efectivamente algo no cuadraba: Al lado de la solución a uno de los subapartados de un ejercicio ponía "0 sobre 1,3" (De los 10 totales). Le expliqué mi solución al profesor que había puesto el problema y me dijo que era correcta, pero que no entendía la expresión matemática del resultado final. Por lo tanto, cero puntos.
Había un error, es cierto: Al copiar parte de la expresión matemática de una función dada en el enunciado, me había confundido y había copiado un símbolo de sumatorio de más. A primera vista, parece algo exagerado restar 1,3 sobre 10 puntos por un simple error de transcripción. Pero al analizar la solución oficial del examen entendí al profesor: Su solución seguía un camino mucho más complicado que implicaba un desarrollo matemático de dos páginas, mientras que la alternativa que habíamos encontrado unos cuantos no llegaba a media página.
Para no entrar en detalles desagradables acerca del problema, se puede explicar con un ejemplo equivalente:
a) Sean dos habitaciones contiguas comunicadas entre si por una puerta: Indique una utilidad importante de la puerta
b) Una persona desea desplazarse de la habitación A a la habitación B. Represente el procedimiento.
¿Parece evidente, no?
a) La puerta permite pasar de una habitación a la otra
b) Para entrar en la habitación B, la persona debe abrir la puerta y pasar por ella
Pues no. La solución oficial sería:
a) La puerta permite pasar de una habitación a la otra
b) Tomese una cantidad suficiente de explosivos. Coloquense en la pared que separa ambas habitaciones y activese la cuenta atrás. La persona deberá cubrirse detrás del mueble inexistente y esperar la explosión. Después la persona podrá atravesar el hueco resultante y alcanzar la habitación B
Evidentemente, no aceptaron mis quejas en revisión. Resultado: 4,1.
La normativa de la UPM contempla una última posibilidad: Reclamar la revisión. Aunque parecía que el resultado era definitivo, por intentarlo no perdía nada. Presenté la reclamación dentro del periodo de "cinco días habiles" que menciona la normativa y esperaba la respuesta en el "plazo de tres día hábiles" que también se impone.
Dos meses y veintisiete días. Tremendo. Han superado todas mis expectativas temporales. La carta dice, por supuesto, que desestiman mi reclamación. Además contestan a mi sugerencia de dejarme explicar la solución al famoso apartado:
"No está entre las atribuciones de la Comisión evaluar los conocimientos del alumno acerca de la asignatura"
Vaya, que curioso. Sobre todo teniendo en cuenta que la normativa dice que la "Comisión Asesora del Departamento citará, si lo estima oportuno, a los alumnos en un plazo máximo de cinco días hábiles". Y yo me pregunto: Si no es para aclarar el examen, ¿para que los citan? ¿Para tomar café juntos? ¿O para reirse en directo de su examen? Me encanta.
A parte de eso, dicho de manera clara y sin formalismos, la respuesta se resume en que cómo se me ocurre tan siquiera dudar de la corrección del examen y que la próxima vez, si mi solución no coincide 1:1 con la oficial, me aguante con el suspenso. Una pena. Ya me puedo despedir hasta dentro de año y medio de la posibilidad de conseguir la Beca de Excelencia. Y todo por culpa de un único símbolo:
Por lo menos consuela leer el artículo del Eco de Teleco acerca de los exámenes de Febrero y en especial acerca del examen de STLN:
Evidentemente no es literal: El Eco de Teleco se define como una revista de humor
Ya antes de Febrero dudaba mucho del sistema de evaluación: No parece lógico intentar saber en tres horas si un alumno ha entendido una asignatura que dura cuatro meses. También hay que tener en cuenta que el objetivo no es el examen sino evaluar conocimientos: Un examen no es más que una herramienta para hacer esa evaluación.
A lo mejor resulta que hay que adaptar / actualizar / cambiar esa herramienta... Pero como siempre, las personas son muy reacias a cambiar algo a lo que ya se han acostumbrado. Independientemente de que esté bien o esté mal.